sábado, 22 de enero de 2011

MERECIDA VICTORIA DE ORTODENT CARAVACA AÑO SANTO 2010 ANTE 7 ISLAS VECINDARIO (3-1).

Por CaravacaDeportes.
Por fin le salen las cosas bien a Ortodent Caravaca Año Santo 2010 y se muestra como un equipo firme, serio y con capacidad para hacer frente a cualquier rival.

El partido de esta tarde, vital para los locales, comienza con intensidad desde el primer punto, sin concesiones y con Ortodent Caravaca muy centrado en el juego (8-6).

Los canarios se ven sorprendidos por la fluidez del juego local, que cierra en la red cualquier intento de puntuar (16-11).

Dos errores locales acortan la distancia en el marcador, lo que obliga a Chema Nicolás a detener el partido. Las instrucciones surten efecto y su equipo sigue mandando en la cancha (19-15).
El tramo final del set es emocionante, aunque al final los locales confirman la superioridad exhibida a lo largo del mismo (25-22).

El segundo parcial muestra la misma tónica del anterior, con Ortodent Caravaca muy firme y siempre por delante en el electrónico (8-7). El partido se pelea mucho en cada punto, que resulta muy caro de obtener (16-14).

Tomás Alvarez se ve obligado a parar el partido (19-16), porque los locales toman el camino directo a la victoria en el set, que se produce con una plácida ventaja (25-19).

La tercera manga puede ser la definitiva y para ello, Ortodent Caravaca sigue firme el recepción y en la red (8-7).

Sin embargo, Vecindario no se rinde y obtiene sus primeras ventajas en el marcador (14-17), ante unos locales que han perdido el rumbo. El tiempo muerto de Chema Nicolás ahora no surte efecto y los canarios están lanzados hacia la victoria (15-20). Ortodent Caravaca muestra su peor cara en el final del tercer set (18-25).

Pero lo visto es sólo un espejismo, no hay duda que hoy Caravaca está muy fuerte y desde el inicio deja las cosas claras (4-1).

El tiempo de Tomás Alvarez no mejora la dinámica de su equipo, que está a merced de los locales, arrolladores en todas las facetas del juego (8-3).

7 Islas Vecindario está roto y baja los brazos, incapaz de parar a los caravaqueños (16-7).

La relajación llega demasiado pronto y Chema Nicolás no quiere confianzas, solicita tiempo muerto y detiene cualquier atisbo de reacción canaria, que únicamente sirve para maquillar el marcador final (25-15).

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